jueves, octubre 27, 2005

Pitutos.

Desde que me decidí a estudiar periodismo el pituto ha sido un tema para mí. Cada vez que decía quién era mi papá, la gente me miraba (otra me lo decía directamente) con cara de: a tí nunca te va a faltar trabajo. Y la verdad es que me da demasiada lata. Aunque mi papá fuera astrónomo creo que hubiera estudiado esto mismo y me encantaría pensar que tendría las mismas oportunidades de trabajo que todo el resto.

Pero no sé... el tema es raro. Es un hecho que si digo mi apellido a lo mejor más personas me van a tomar en cuenta, pero me carga. Y no sólo eso. Con esto de empezar a sacar fotos para la revista tampoco me siento muy bien.

Claro que es un agrado que por trabajar un rato me paguen bien, pero el hecho de haber llegado ahí sólo por mi hermana me causa un poco de conflicto. Sí, siempre me ha gustado la fotografía. Pero deben haber como mil personas que saquen mucho mejores fotos que yo, pero que no tengan la suerte de tener una hermana que trabaja donde trabaja la mía.

Entonces qué hago. ¿Sigo pensando que estoy ahí sólo por eso o me paso a todo el mundo por la raja y creo que es porque lo hago bien?
Todavía no lo sé. Pero por el momento estoy intentando disfrutarlo. Y aprovecharlo (por supuesto).

lunes, octubre 24, 2005

Resumen.

Hace tiempo que tenía ganas de escribir acá, pero no había podido. Así que ahora un resumen de todo lo que quería poner.

He estado sacando fotos para la vida social de la Revista Caras. Aunque no han sido muchas, ni estoy de fotógrafa oficial (sólo reemplazante), ha sido choro. Gracias a eso pude ir a la avant première de Se Arrienda y sacarle fotos a todo el jet set criollo. Igual graciosillo. Además me publicaron página entera, so... más dinerillo para mí y para el enchulamiento de mi computador.

Otro de los eventos a los que tuve que ir fue el lanzamiento de un libro en el colegio Notre Dame. El evento era cero glamour y no había mucha gente fotografiable, pero inevitablemente me acordé del colegio. Es que además en el Notre Dame todo el mundo es scout, y uno de los discursos fue aplaudido con un matemático (lo malo fue que estaba con la cámara en una mano y la libretita en la otra, así que no pude hacer mucho). Pero eso. Me acordé de los niños de scout, de los campamentos y de que los pasábamos chancho. Snif.

Y, finalmente, agradezco al Padre Hurtado, porque gracias a él mi padre se fue a Roma y pude tener una semanilla para estar con Novio. Ya, super nada que ver yo, pero es que igual lo pasé chancho el fin de semana en Peñaflor, me reí harto. Lo mejor de todo es que hoy día la Nelly me dijo: No se preocupe señorita Valentina (porque no puede evitar decirme así), a mí una vez me dijeron que una en este trabajo tiene que ser sorda, ciega y muda. ¡Grande Nelly!

Eso no más por ahora.